Que aún te brillen los ojos y te tiemble la voz
cuando hables de mí...
que te suden las manos
porque quieres sentir las mías,
que aún el corazón se te acelere y te emociones
al contar una historia de las que sólo pueden ser nuestras,
que no dejes de imaginar mi figura en tu mente
y que tus labios sigan sintiendo los míos
porque se mueren de ganas por volver a tenerlos
y que una vez más te vuelvas a aferrar a este gran amor.
Dime que no puedes sacarme de tu mente y
que deseas volver a tenerme entre tus brazos,
que las horas sin mí se te hacen eternas
y no sabes cómo matar el tiempo,
que deseas hacerlo escabulléndote entre mis piernas,
acariciándome y regando besos por todo mi cuello,
que mi recuerdo te está volviendo loco,
llenándote de antojos por mí.
cuando hables de mí...
que te suden las manos
porque quieres sentir las mías,
que aún el corazón se te acelere y te emociones
al contar una historia de las que sólo pueden ser nuestras,
que no dejes de imaginar mi figura en tu mente
y que tus labios sigan sintiendo los míos
porque se mueren de ganas por volver a tenerlos
y que una vez más te vuelvas a aferrar a este gran amor.
Dime que no puedes sacarme de tu mente y
que deseas volver a tenerme entre tus brazos,
que las horas sin mí se te hacen eternas
y no sabes cómo matar el tiempo,
que deseas hacerlo escabulléndote entre mis piernas,
acariciándome y regando besos por todo mi cuello,
que mi recuerdo te está volviendo loco,
llenándote de antojos por mí.
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